El Oktoberfest registra un menor consumo de cerveza a pesar del récord de asistentes

Una vez que las carpas han sido desmontadas y el Theresienwiese ha quedado a disposición de runners y paseantes  de perros, es hora de hacer balance de la última edición del Oktoberfest de Múnich. Según los organizadores, el  Oktoberfest 2023 batió un récord de casi cuatro décadas al atraer a 7,2 millones de visitantes. El récord de asistencia  anterior había quedado establecido en 1985, con 7 millones de visitantes, pero este 2023 fue superado por 200.000  visitantes más. En este incremento podría haber influido su duración de 18 días, dos días más de lo habitual, debido a  que el 3 de octubre, Tag der Deutschen Einheit (“Día de la unidad alemana”), fue festivo nacional.  

A pesar de haber alcanzado un nuevo récord en términos de número de visitantes, el consumo de cerveza per cápita  no estuvo en consonancia, reduciéndose con respecto a años anteriores. Desde el 16 de septiembre, se sirvieron  aproximadamente 6,5 millones de litros de cerveza. Esto se traduce en un consumo inferior a una Maß (la  característica jarra de cerveza de 1 litro que se suele utilizar en el Oktoberfest) por persona, lo que es notablemente  menor a los 7,3 millones de litros consumidos en la edición prepandémica de 2019.  

Siendo optimistas, los responsables de las carpas prefirieron comparar esa cifra con la de 2022 –el primer año que se  celebraba la fiesta después de un descanso obligado de dos ediciones— año en que se vendieron 5,7 millones de  litros. La cerveza representó entre el 80 y el 90% de las bebidas vendidas en el festival de 2023, pero el 20% ciento de  estas ventas fueron de cerveza sin alcohol. La estadística no es sorprendente considerando el creciente cambio hacia  este producto en los últimos años.  

Las cifras de la Oficina Federal de Estadística revelan que la producción de cerveza sin alcohol, que contiene menos  del 0,5% de alcohol, casi se ha duplicado en la última década. Dicho esto, según un informe de 2021 de la  Organización Mundial de la Salud (OMS), Alemania tiene el cuarto mayor consumo de alcohol per cápita de la UE. Al  contrario que los cerveceros locales —los únicos que están autorizados a vender sus productos en el recinto de la  fiesta— las autoridades de la ciudad de Múnich consideran que este cambio hacia opciones sin alcohol es una  tendencia positiva y alentadora.  

Debido al clima cálido y soleado, el agua con gas resultó ser especialmente popular y en algunas carpas incluso hubo  una escasez temporal, como mencionó el responsable del Oktoberfest, Clemens Baumgärtner. A pesar de las  preocupaciones sobre la alta inflación que podría afectar el gasto de los consumidores, los propietarios de las carpas  experimentaron un aumento del 15% en los ingresos por comida y bebidas en comparación con el año anterior,  según informó Baumgärtner. Los precios de la cerveza en el Oktoberfest 2023 oscilaron entre 12,60 y 14,90 euros por  litro, lo que supuso un aumento medio del 6,12% en comparación con el año pasado.  

Si bien la mayoría de los asistentes procedían de Múnich y sus alrededores, muchos de ellos procedían de Francia,  Italia y Estados Unidos. De los millones de personas que acudieron desde todo el mundo, fueron los italianos quienes  constituyeron el grupo más grande de visitantes extranjeros. Después de que en 2020 y 2021 el Oktoberfest tuviera  que ser cancelado debido a la pandemia, el COVID-19 no fue una preocupación en la edición de 2023.  

Se vio a muy pocas personas con mascarillas y las aglomeraciones, unido al ambiente cálido y húmedo,  proporcionaron un entorno ideal para la propagación del coronavirus. La tasa de incidencia del SARS-CoV-2 en  Múnich durante el Oktoberfest del año pasado se multiplicó por cuatro y fue significativamente más alta que la  media nacional después del festival. El Departamento de Salud de la ciudad de Múnich confirmó que este año las  cifras de COVID-19 también han ido aumentando, especialmente desde la semana 37 del calendario, cuando  comenzó el Oktoberfest.  

Andreas Franken, del Departamento de Policía de Múnich, señaló que los incidentes relacionados con el alcohol  habían disminuido significativamente, con un 40% menos de personas que requirieron atención durante la noche que  el año anterior. En general, hubo una ligera reducción en los delitos denunciados, pero no faltaron 29 casos de las  tristemente habituales peleas de jarras de cerveza o Maßkrug. 

Aun así, el incidente que más atracción mediática despertó fue la detención de dos jóvenes turistas italianos por  hacer el saludo nazi, algo que en Alemania está castigado por la ley. En 2024, el Oktoberfest se celebrará entre el 21  de septiembre y 6 de octubre

Cultura de Cerveza

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