La bajada de temperaturas generaliza en el continente dificultó los cultivos de vid, lo que hizo que el vino fuese perdiendo terreno a favor de la cerveza.
• Este cambio fue especialmente destacable en Alemania, Bohemia y Flandes, donde las diferentes casas reales gravaban con impuestos a la vid. Ante las malas cosechas de uva, los nobles pusieron sus ojos en el grano.
• Hasta ese momento la principal atención que recibía el cereal era como materia prima para producir pan, estando relegada la cerveza a un segundo plano.
• Esa nueva atención no solo hizo que los cerveceros pasasen a ser una buena “presa” para los recaudadores de impuestos.
• Al carecer de uva, muchos productores de vino se reconvirtieron en cerveceros, lo que unido a un aumento de la población sedienta aumentó drásticamente el precio de la cebada en el siglo XVI.
• Al mismo tiempo que se tasaba la fabricación y venta de cerveza, la nobleza centroeuropea comenzó a regular los procesos de elaboración. Esas leyes, de las cuales la más famosa es la Reinheitsgebot o Ley Alemana de la Pureza de la Cerveza, promulgada por Guillermo IV de Baviera en 1516, no solo tenían como fin garantizar la calidad de la bebida.
• Escondían otros motivos como el monopolio de algunos ingredientes como el gruit y el lúpulo, o la limitación del uso de trigo en la producción de cerveza para evitar dejar a la población sin el necesario suministro de pan. Algo similar sucedía con la avena en el caso del forraje para los animales.
• Las autoridades también supervisaron los procesos de elaboración con el fin de optimizar las tareas y evitar la inflación. Esos métodos de producción y cosecha más eficaces convirtieron a la región de Centroeuropa en líder de la producción cervecera, haciendo que esa actividad fuese meramente testimonial en otras zonas.
• Algunos especialistas creen que las ordenanzas que prohibían la elaboración de cerveza durante el verano, aparentemente destinadas a garantizar la calidad de la cerveza y regular los precios antes de la cosecha, podrían haber favorecido la aparición de las Lagers o cervezas de baja fermentación, una familia exclusiva de Centroeuropa.