Fernando Iglesias, presidente del jurado del Campeonato, nos cuenta las claves para el servicio de una buena cerveza
“Un buen tiraje es importante simplemente porque la cerveza está más buena”
Para ganar el Campeonato de Tiraje Estrella Galicia, ¿es suficiente con saber tirar correctamente una caña?
No, el campeonato exige un conocimiento detallado de nuestras cervezas y de su servicio. De hecho las pruebas no se basan únicamente en el tiraje de cañas. Los participantes también tienen que realizan ante el jurado un servicio perfecto de la 1906 Reserva Especial envasada en botella y responder a preguntas técnicas sobre nuestras cervezas y sus características del servicio.
¿Cuáles son los errores más habituales que cometen los participantes?
No usar el mojacopas, no marcar correctamente los dos tiempos del servicio, no presentar la copa con un posavasos,… En la mayor parte de los casos estos errores vienen motivados por los nervios. Es curioso comprobar como a muchos participantes les tiemblan las manos como consecuencia de la tensión. El mejor consejo que se puede dar es dejar los nervios en caso y traer solo conocimientos y pasión cervecera.
El Campeonato de este domingo se celebra en Bilbao, una de las capitales del pintxo, ¿esperáis encontrar buen nivel?
Sin duda. Como primer comentario indicar que, de todos los celebrados hasta el momento, es el certamen donde tuvimos un mayor número de inscritos. En el Comité de Selección tuvimos que trabajar duro para seleccionar a los participantes siguiendo los criterios establecidos en las bases. Bilbao es una ciudad donde la cultura gastronómica tiene un grandísimo peso y sus hosteleros un enorme prestigio. Cada día la cerveza se está sumando con mayor intensidad a esa cultura, de manera que no hemos podido elegir una mejor capital para celebrarlo.
Como jurado, ¿cuál es la mayor dificultad a la hora de valorar un tiraje?
Esto que os voy a comentar es un clásico, pero la labor del jurado es complicadísima. Pensar que estamos en un certamen en el que la exigencia técnica es elevada. Esto hace que la diferencia entre el ganador y el resto de participantes esté en pequeños detalles que hacen que el servicio pase de ser bueno a ser excelente. Ahí está la dificultad. Llegar a detectar y medir esos pequeños detalles llegando a una unanimidad por parte de todos los componentes del jurado.
