Nos vamos de viaje a la Tierra Media para conocer la pasión por la cerveza de J.R.R. Tolkien. Escritor, profesor y amante cervecero.
El idilio de J.R.R.Tolkien con las pintas de Ale empezó durante su época de profesor en Oxford. En el vetusto pub The Eagle and Child esbozó seguramente algunos capítulos de El Hobbit y El Señor de los Anillos. Y las dos obras más conocidas de Tolkien están plagadas de referencias a las tabernas y a la cerveza. Además, sus personajes son unos entusiastas de la comida y la bebida.
La cerveza de la Tierra Media
En sus libros, los hobbits son unos avanzados foodies que comen siete veces al día; y también son grandes productores de cerveza artesanal, por eso en sus alacenas nunca falta un barril de Ale.
En El Señor de los Anillos, los traviesos Merry y Pippin siempre están buscando el momento para tomarse una jarra de cerveza y cuando encuentran unos barriles en las ruinas de Isengard, no desperdician la oportunidad y se dan un buen homenaje.
Otra de las referencias más destacadas es el momento en el que Frodo y Samsagaz atraviesan Mordor y recuerdan con nostalgia que están en la mejor época de la cerveza en la Comarca.
También el personaje de Gandalf demuestra lo importante que era la cerveza para Tolkien. El mago tiene la capacidad de agriar la cerveza o de garantizar siete años de buena elaboración a los posaderos de la Tierra Media.
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