Por Bruno Corrales
Orgullo e ilusión. Intuimos que eso es lo que debieron sentir el viernes tanto familiares y amigos como los más tempranos seguidores, musiqueros de buen gusto pendientes de esos nuevos talentos que surgen de los lugares más inesperados. Lo mismo debieron tener mezclado en el pecho compañeros de sello y organizadoras del imprescindible Voces Femeninas. El ciclo cerraba el semestre de su actual edición con un concierto muy especial en Madrid, pues se trataba de celebrar el primer disco de Marem Ladson, a quien hemos visto crecer. Punto de partida homónimo de una artista que incluso ya había llamado la atención sin nada publicado.
Algunos recordamos su presentación en el Teatro del Arte, introduciendo a Laura Gibson, y todos la tendremos todavía más presente desde la noche del 8 de junio. Anticipadas agotadas y solo unas pocas entradas en taquilla para disfrutar de la puesta de largo de su debut. Por supuesto, y por suerte, con banda. Brian Hunt y Juan Diego Gosálvez incluidos, referencias en el panorama independiente de nuestro país y productores de un disco publicado por un sello cuidadoso y personal como pocos, Mont Ventoux, casa de Tripulante y Crucero o de Alondra Bentley.
Así, todo parecía encajar, y pasadas las nueve de la noche el ambiente de la céntrica sala Alevosía era el ideal para recibir las primeras notas (y las primeras historias) del diario de Marem Ladson. Su primer disco es un recorrido personal de lo vivido desde que comenzó a escribir las primeras canciones en plena adolescencia, entre Estados Unidos y Ourense. No es de extrañar ver cómo se cuelan referencias pop de los primeros compases del siglo XXI, en forma de versión de Nelly Furtado, con temas primigenios tan inspirados como “All my storms”. Evitemos las comparaciones con otras artistas cercanas al folk, pues ella pretende recorrer otro camino que sea simplemente el suyo. Trazas de dream pop, blues y, sí, folk con verdadero sentimiento.
Destacaría sin duda su único momento sola sobre el escenario llegando al final del concierto, en el que interpretaba una complicada “You are not welcome” para luego cerrar con banda y enorme vitalidad, homenajeando a Galicia a golpe de power pop. Marem Ladson es una de las artistas más interesantes de una nueva generación de músicas. Con todo por delante pero algo imprescindible ya entre manos, capacidad para emocionar y personalidad.
