El viernes 6 y ante amenazas de lluvia comenzaba un Festival do Norte bajo dos escenarios cubiertos con carpas instaladas como medida de protección ante el tiempo previsto. A pesar de ello parecía que a la gente la posibilidad de chubascos no le quitaba las ganas de irse acercando poco a poco al que se convertiría en un festival ameno y de ambiente alegre y distendido.

Como saben los que han acudido al festival, los conciertos se celebraron en dos carpas: los de las primeras horas de la tarde en la carpa mediana de Novacaixagalicia, y los nocturnos bajo la de Estrella Galicia. Esto hizo que, salvo a excepción de Sexy Sadie el sábado, los artistas fueran muy puntuales y no se pisaran las actuaciones.

Los encargados de abrir el festival a eso de las 17:15 de la tarde del viernes fueron este año SraSrSra. Irreverentes, frescos y tomándose en serio solo lo justo, demostraron todo su potencial en el directo.
Unos 45 minutos después llegaba el turno para McEnroe, sin Pablo Isusi al bajo y también con una actuación corta pero intensa rodeada de guitarras y épica mística.

La carpa ya se empezaba a ver más llena a medida que avanzaba la tarde, y es que tras los getxotarras le tocaba el turno a Nadadora, que presentaban su tercer disco “Luz, oscuridad, luz” y que atrajo a numerosos fans a las primeras filas de la carpa.

Joe Crepúsculo fue el encargado de caldear el ambiente y pasar de las guitarras y lo místico al baile a ritmo de cumbia. Crepus animó el cotarro con sus diversos y animados chistes.

Llegaba el momento entonces de hacer el cambio de carpa. La gente, armada con sus guitarras de plástico y sus vasos de Estrella Galicia se dejaba llevar hasta la carpa grande para dar comienzo a la segunda parte del viernes. Alguno de los festivaleros decidió que ese era buen momento para descansar un poco y alimentarse, con lo que nos dirigimos a pabellón destinado a los puestos de comida y mercadillo (la verdad es que en cuanto a espacios la organización fue perfecta).

Ellos y Chapel Club fueron las dos primeras actuaciones, con la carpa aún a medio llenar pero muy buen ambiente. La verdad es que los debutantes Chapel Club, que asistían como una de las promesas nos gustaron bastante y nos emocionaron con “All the Eastern Girls” y su profundidad y misterio, que nos recordaron por momentos a bandas como Los Smiths o Interpol.

Se empezaba a oír jaleo y ver a la gente en movimiento, eso sólo podía significar una cosa, tocaba el turno de Delafe y Las Flores Azules, acompañados de Las Trompetas de la muerte. Los catalanes, sin duda alguna y a pesar de la diversidad de opiniones que te puedes encontrar ante su música, fueron de lo mejorcito de la noche. No pararon de saltar, brincar y correr por el escenario, si hasta nos dieron un cursillo rápido de su famoso movimiento el «Steady Rinnung»!! El público estaba encantado, la fiesta había comenzado.

May 68 mezcló en el escenario un poco punk, pop y electrónica para dar pie a lo mejor de la noche para nuestro gusto, Chk Chk Chk. Un Nick Offer animadísimo que bajó al público varias veces, bailo y se recorrió el escenario de cabo a rabo.

Sin duda alguna fue la guinda a una noche animada perfecta, así que nos retiramos al hotel para quedarnos con ese buen sabor de boca, y sin pasar por la carpa mediana a ver a Iván Dj (residente de la Sala Karma) y Florent y DJ J. Nuestro cuerpo pedía un respiro.

Comienza el sábado, tras reponer fuerzas en el desayuno y varias horas de descanso veíamos como se iba cubriendo el cielo con una nube gris plomiza que dejaba entrever la que estaba por caer. El diluvio universal que sucedía horas después nos impidió acudir a las primeras actuaciones: Diadermin y Franc3s.

Llegamos calados de arriba abajo y veíamos como la carpa mediana se quedaba pequeña ante la cantidad de gente que intentaba cubrirse de las inclemencias del tiempo. Comenzaba entonces Pony Bravo con su segundo disco “Un Gramo de Fe” bajo el brazo y algo después la banda de Brighton, Mirrors, que tocaba en sustitución de The Wave Pictures, pero parecía que el ambiente estaba más apagado que el día anterior.

Mientras Mirrors estaban actuando en el escenario pequeño, corrían diversos rumores de que Sexy Sadie cancelaban su actuación: que si no podían aterrizar por el tiempo, retrasos en los vuelos… Al final, y tras petición directa del manager de que esperáramos 10 minutos más, llegaron y la gente comenzó a animarse de nuevo con su corta pero inmejorable actuación.

Llegaba entonces la hora de Triángulo de Amor Bizarro y su “Año Santo” y con un miembro nuevo al teclado y la guitarra, Zippo. Hay que mencionar que comenzaron con un pequeño traspiés al romper la batería, pero su shoegaze y actitud punk animaron en ambiente de nuevo y dejaron claro que, hoy por hoy, son una de las mejores bandas de su generación.

The Vaselines llegaban al escenario con su primer disco, ”Dum Dum”, publicado en 1987 tras el que se disolvieron, y también con el “Sex With An X” que acaban de lanzar. Acertaron por lo tanto al elegir un setlist lleno de canciones de sus primeros tiempos.

Peter Hook y el Unknow Pleasures era una de las actuaciones más esperadas de la noche, pero lamentablemente el ex Joy Division no estuvo a la altura. Se ha dicho mucho respecto al derecho que tiene, o no, a recuperar el legado de la banda, pero dejando ese tema apartado, creemos que su actuación no respetó la esencia y el sonido de su propio ex grupo. A pesar de nuestra humilde opinión el escenario estaba lleno de fans de Joy Division que disfrutaron con la actuación y el buen ambiente general.

La noche y el Festival do Norte lo cerraron London Guns y luego Guille Milkyway, a quien ya no asistimos por el frío que estábamos pasando con la ropa tan mojada, eran cerca de las 2:00 de la mañana y habíamos cumplido. ;D