Nacho Vegas se alía con Refree, Fernando Alfaro y I’m Artist, y crean una plataforma en favor de la autoedición de discos.

MarxoPhone, una curiosa iniciativa en el mundo de la música. Se trata de una plataforma en favor de la autoedición de discos. Un colectivo tras el cual se hallan el cantautor asturiano Nacho Vegas, Refree, Fernando Alforo y la agencia de contratación y management, I’m Artist.

Marxophone, cuya denominación sale de Parlophone (sello de The Beatles) y el nombre del filósofo Marx, se basa en la autoedición. Su idea principal es saltarse el trámite de las discográficas. La primera referencia de este proyecto es el nuevo disco de Refree, “Matilda”, que saldrá al mercado el próximo 15 de noviembre.

Del mismo modo, se publicará el próximo disco de Nacho Vegas que verá la luz en febrero de 2011 y cuyo título provisional es “Reavivación de las hostilidades”. El asturiano deja Limbo Starr, el sello discográfico con el que empezó en 2001 su aventura en solitario publicando “Actos Inexplicables”.

Para celebrar la llegada al mercado de Marxophone, el jueves 11 de noviembre se celebra un concierto especial de Fernando Alfaro en la Sala Ramdall de Madrid.

A continuación, reproducimos su manifiesto de presentación:

“España jamás ha adoptado la moderna moda francesa consistenteen comenzar y realizar una revolución en tres días”. Carlos Marx (‘New York Daily Tribune’, 9 de septiembre de 1854).

Tiene gracia. Aunque sabíamos que todo esto, o al menos algo parecido, iba a ocurrir, no habíamos sido capaces de convertirlo en algo concreto. Sin embargo, la realidad, tozuda como siempre, nos ha ido empujando y uniendo a distintos músicos en una idea parecida, en principio abstracta, muy vaga, sin nombre. Sin que apenas nos diéramos cuenta. Lentamente. Sin una intención predeterminada. Pero ha ocurrido. Estamos aquí. Hemos llegado. Por fin.

Hagamos historia. Desde hace años, cada vez se nos hacía más complicado perder tiempo y energías en discusiones, dudas y esperas. Innecesarias, agotadoras y casi siempre relacionadas con eso de fabricar discos. No era un problema con los sellos discográficos en general ni con las personas que se encargan de ellos, todas maravillosas, sino con la idea de sello en sí misma. Con su concepto. ¿Está agotado? Sinceramente, ¿es imprescindible tener un sello a estas alturas? ¿Son una ayuda o se han convertido en un obstáculo?

Así que, entre cerveza y cerveza, aquella noche en Barcelona, empezamos a hablar de autoeditarnos, de arriesgar, de volver a un momento fundacional, primitivo y atrayente. Autoeditarnos. Sonaba bien. Tomar decisiones. No esperar. Que las canciones fueran nuestras y de nadie más. No entrar en aburridas espirales sin salida, no esperar a unos royalties que en realidad nunca han existido ni existirán, sino tomar las riendas de nuestra propia obra. Preparar las canciones y grabar un disco sin mirar el calendario. Trabajar. Autoeditarse. Sonaba bien. No, no traigas cerveza, mejor trae ya el vino.

Pero, claro, había un problema, formulado siempre en forma de tópico: “los artistas no saben controlar sus negocios”. Bueno, ¡algunos sí! Y no es el lugar de explicar quiénes. Pero era cierto. No tenemos demasiado tiempo para encargarnos de la logística necesaria para editar un disco y para que la gente sepa al menos que lo hemos editado. La fabricación. La promoción. Eso asusta, y no tiene nada que ver con nuestro trabajo. Pero podían hacerlo los de I’m An Artist, que han participado en muchas de esas neblinosas conversaciones de bar sobre lo divino y lo humano, sobre la edición y la autoedición, sobre si la industria musical tiene algún futuro o debe reinventarse desde la base. Y están con nosotros y tienen ganas de lanzarse.

Hecho. Aquí estamos, en plena revolución, o simplemente en una modesta reforma (la discusión entre revolucionarios y reformistas también es eterna y apasionante y da mucho juego), preparados para experimentar y pensar en reinventar el negocio. Decidido. Como el nombre, y mira que ha costado encontrar un nombre. Este colectivo se va a llamar Marxophone, algo entre Parlophone y la revolución. Marxophone.

Hecho. Nos vamos a autoeditar. Y nos gusta. Y empezamos ya, el 15 de noviembre, con “Matilda”, el nuevo disco de Refree. Que no nos pase nada. Gracias a todos.

Marxophone ya tiene Facebook y Twitter y, en principio, sus discos estarán en Spotify.

Os dejamos la opinión de JNSP, El Referente, La Furgoneta Azul y diariodejerez.es

Fuente:
http://www.europapress.es
http://www.hipersonica.com
http://muzikalia.com